5 claves para proteger tu empresa en contratos con cláusula arbitral 

En el mundo de los negocios, los contratos con cláusula arbitral son cada vez más comunes. Se presentan como una alternativa ágil y privada a la justicia ordinaria. Sin embargo, la inclusión de un arbitraje mal diseñado o poco estratégico puede exponer a tu empresa a altos costos, indefensión o incluso perder el control sobre el conflicto.  

En C&L Abogados sabemos que el detalle importa. Por eso, compartimos cinco claves fundamentales para proteger tu operación al pactar este tipo de cláusulas. 

1. Elige cuidadosamente el tipo de árbitro 

La cláusula debe especificar si se tratará de un árbitro de derecho o un árbitro arbitrador. El primero está obligado a fallar conforme a derecho; el segundo tiene amplias facultades para resolver "en conciencia", lo que puede generar más incertidumbre. En la mayoría de los contratos entre empresas conviene optar por un árbitro de derecho para asegurar decisiones fundadas jurídicamente. 

2. Define un procedimiento claro 

Muchos conflictos escalan por la falta de reglas claras sobre cómo se desarrollará el arbitraje. Es aconsejable pactar expresamente plazos, etapas (como audiencia de conciliación previa), normas supletorias (como el reglamento CAM Santiago) y lugar de realización del procedimiento. 

3. Evita dejar la designación del árbitro al azar 

Una práctica riesgosa es establecer que el árbitro será designado por común acuerdo, sin prever qué pasa si ese acuerdo no se alcanza. Recomendamos dejar la designación a cargo de una institución especializada (como el CAM Santiago o el Colegio de Abogados), incluyendo un mecanismo alternativo si la primera opción falla. 

4. Cuida la igualdad de condiciones 

Es fundamental que la cláusula no favorezca desproporcionadamente a una de las partes. Por ejemplo, evitar que una sola parte tenga derecho a elegir el árbitro o decidir unilateralmente el lugar del procedimiento. Las cláusulas desequilibradas pueden ser cuestionadas o generar problemas de ejecución. 

5. Asegura la ejecución del laudo 

Un laudo arbitral tiene fuerza ejecutiva, pero su cumplimiento depende de que la cláusula esté bien redactada. Asegúrate de que el contrato contemple expresamente que el laudo será obligatorio y exigible, y que ambas partes renuncian a recursos que puedan dilatar su cumplimiento. 

Conclusión 

Las cláusulas arbitrales pueden ser una herramienta poderosa para la resolución de conflictos, pero solo si se diseñan con visión estratégica. En C&L Abogados asesoramos a empresas en la redacción y revisión de contratos con cláusulas arbitrales, buscando siempre resguardar su posición jurídica y prevenir litigios costosos. ¿Tu empresa está protegida?