5 ventajas de usar sociedades vehículo en tus operaciones 

En el mundo empresarial actual, en el que la eficiencia jurídica y la gestión estratégica del riesgo son clave para la sostenibilidad y el crecimiento, el uso de sociedades vehículo —también conocidas como SPV— se ha convertido en una práctica común en operaciones complejas. Este tipo de entidades ofrece beneficios significativos que pueden marcar la diferencia en la viabilidad de una operación, por ejemplo, en proyectos inmobiliarios, inversiones conjuntas o financiamientos estructurados. 

En C&L Abogados asesoramos regularmente a nuestros clientes en la estructuración y gestión de sociedades vehículo. A continuación, te compartimos cinco ventajas claves de la utilización de estas sociedades: 

1. Aislamiento de riesgos 

La principal razón para utilizar una sociedad vehículo es aislar los riesgos de una operación específica del resto del patrimonio o actividades del grupo empresarial. Al mantener los activos y pasivos del proyecto dentro de una entidad separada, se protege a la empresa matriz de eventuales contingencias, demandas o deudas originadas en dicha operación. 

2. Facilita la entrada de nuevos socios o inversionistas 

Una sociedad vehículo permite estructurar de manera clara la participación de terceros en un proyecto determinado. Esto es especialmente útil en joint ventures, proyectos inmobiliarios o energéticos; puesto que cada parte desea mantener un control acotado del negocio y una salida definida. La SPV actúa como contenedor de derechos y obligaciones, y de esta forma simplifica las relaciones entre socios. 

3. Optimización tributaria y financiera 

La creación de una sociedad vehículo puede facilitar el acceso a mecanismos de financiamiento o beneficios tributarios que no serían accesibles de forma directa por la empresa matriz. Además, permite una contabilidad separada del proyecto, lo que mejora la transparencia y facilita la evaluación de su rentabilidad real. 

4. Claridad en la asignación de activos y pasivos 

Cuando una operación involucra múltiples propiedades, contratos o derechos, consolidarlos dentro de una única entidad permite una administración más ordenada y una trazabilidad jurídica más robusta. Esta estructura es especialmente recomendable en operaciones sujetas a fiscalización o evaluación de impacto regulatorio. 

5. Facilidad en la venta o transferencia del proyecto 

Una ventaja estratégica es la posibilidad de transferir la totalidad del proyecto mediante la venta de las acciones de la sociedad vehículo, para así evitar traspasos individuales de contratos, permisos o bienes. Esto reduce costos notariales, simplifica trámites y otorga mayor certeza jurídica al comprador. 

¿Es siempre recomendable usar una sociedad vehículo? 

No necesariamente. Su conveniencia depende del tipo de proyecto, la duración, los costos de mantención de la entidad y las implicancias tributarias asociadas. En C&L Abogados evaluamos cada caso en detalle para determinar si esta herramienta es adecuada para tus objetivos, y te acompañamos en todo el proceso de constitución, operación y eventual liquidación o venta de la SPV. 

¿Estás planificando una operación compleja o necesitas estructurar adecuadamente un proyecto de inversión? Escríbenos. En C&L Abogados somos expertos en estructuración jurídica de operaciones estratégicas.